21 septiembre 2008

La Filípica de los Lunes: No hablaré de la crisis

He vuelto. Después de tres meses sin lanzar una filípica, al menos por escrito, mi amigo y compañero Balhisay ayer tarde me formuló la pregunta clave: "¿Cuándo vas a volver a escribir para el blog?". Y claro, ha comenzado ha remorderme la conciencia hasta que me he sentado delante del teclado. Pero la cuestión es, ¿De qué puedo escribir después de tantas semanas?

¿El inicio del curso?, ¿La renovación del CGPJ?, ¿La crisis? Puff, esto último no, porque como diga lo que pienso de verdad del tema me pueden llover las críticas desde todos los sectores: porque como se me ocurra meterme con el Gobierno por negar lo evidente y no ser capaces de hacer nada para reactivar la economía... malo. O como hable de la oposición que se está frotando las manos y deseando que la cosa vaya a peor para poder garantizarse una victoria de Rajoy en las próximas elecciones... peor.

Ya sé, puedo realizar algún comentario sobre las pobrecitas inmobiliarias, promotoras y constructoras que, después de haber obtenido unos pingües beneficios a costa del crecimiento del precio de la vivienda (que no de su valor), ahora resulta que se joroba el invento y tienen algún que otro problemilla para vender. ¿Y qué nos encontramos? Que esas todopoderosas empresas, especiamente las promotoras y constructoras, no lo eran tanto. Ahora se está demostrando que estaban endeudadas con los bancos hasta las cejas.

Yo, que no me considero ninguna lumbrera, sabía al igual que la inmensa mayoría de la gente que el boom de vender pisos como churros, más pronto que tarde se iba a terminar; entonces ¿por qué los mandamases de las promotoras y sucedáneos se lanzaron como locos a comprar más y más terreno a precio de oro, pidiendo para ello más y más préstamos a los bancos? ¿Pensaban que la racha iba a durar siempre? ¿No intuían que antes o después podrían subir los tipos de interés y costarle más caro todavía el dinero que habían pedido prestado? ¿Nadie les contó cuando eran chicos la fábula de la hormiga, que guardaba parte de la comida para afrontar el invierno, y la cigarra, que se gastaba todo sobre la marcha? La verdad, no me lo explico.

Y claro, pobrecitos, con lo buenos que han sido estas empresas compartiendo con la sociedad sus tremendas ganancias, sus indecentes sueldos y sus inmerecidas comisiones de compraventa, lógicamente ahora el Estado (o sea todos nosotros) tenemos que echarle una mano para que salgan del hoyo. Pues no. Que se fastidien. Ojalá que no consigan vender ni una escoba y se vean obligados a bajar el precio hasta llegar a un nivel asequible y lógico para los asalariados. Es que era indecente cómo, secundados por los especuladores, incrementaban el precio de la vivienda subiéndole un millón de pelas cada mes que pasaba. Ahora que se toquen las narices, coño. Que para una vez que de verdad se cumple lo de que la avaricia rompe el saco, quieren que venga el Estado a socorrerles.

Lo malo de todo esto es la enorme cantidad de trabajadores que se están quedando sin trabajo porque esas empresas no han sabido crecer de manera lógica y consistente, queriendo obtener en dos años las ganancias de toda una vida y exprimiendo la gallina de los huevos de oro hasta que la han dejado exhausta. ¡Joder! Si es que toda la sociedad nos hemos lanzado de lleno a esa vorágine.

Pues ahora toca apretarnos el cinturón y si no podemos ir de vacaciones al Caribe o de crucero por el Adriático, pues nos vamos en el coche unos días de turismo nacional en hoteles de 2 estrellas, que no nos pasa nada. Y si en vez de un Mercedes o un Audi tenemos que apañarnos con el Seat Córdoba, pues lo hacemos y punto. Que durante unos años hemos gastado como si el dinero cayera del cielo y ahora, por desgracia, son miles las personas que miran al cielo pidiendo un trabajillo para salir adelante.

Pero será mejor que este tema de la crisis no lo toque porque como diga todo lo que acabo de mencionar, mucha gente se va a molestar con mi opinión. Así que tendré que buscar otro asunto que tratar, pero casi mejor me espero a la semana que viene.
Moisés Chacón.

4 comentarios:

balhisay dijo...

Comparto mi nulo aprecio por los/as espabilados/as de las constructoras, inmobiliarias, promotoras,... al menos por los patronos y lo siento por todos los asalariados que se ven de un día para otro en la calle y con una hipoteca a 40 años que no pueden afrontar.

Un abrazo y gracias por el regreso.

Anónimo dijo...

Comparto todo lo dicho sobre la crisis, pero estoy harto hasta la náusea de oirla en todos los medios y a todas horas, que triste ver tanta gente parada, pero eso tiene hacer mal las cosas, que tarde o temprano pasa factura. Si cada cual aspirara a hacer bien su trabajo (o al menos lo intentara) otro gallo cantaría.... y a los especuladores y promotores de los que habláis, que se pongan a recoger la basura de las cunetas y de las zonas recreativas rurales, que son materia atrasada. Dejando los temás ocres de la actualidad, me gustaría lanzar otra pregunta clave de lo que puede leer brevemente y recientemente en la web de la emisora, ¿Para cuando detalles de las celebraciones del XX Aniversario de la emisora?.
Buen dia.

Moises dijo...

Pues acerca del aniversario, estamos seleccionando cortes de antiguos programas, además queremos realizar una programación especial con la participación de antiguos colaboradores, estamos preparando una exposición con fotografías y documentos de la radio y también queremos realizar una gran reunión de la familia de Radio Contadero a lo largo de su historia.
Pero la conmemoración queremos que se prolongue durante varios meses, así que estamos abiertos a ideas y sugerencias...

Anónimo dijo...

Buenas noches.
Sería interesante conocer a través del blog de que van los nuevos programas de la parrilla: OBJETIVO HV (prox.) o CUENTOS CONTIGO, por ejemplo.

Muchas gracias.